En enero de 2022, artista nacido en Londres Jacob Lázaro Se unió a un recorrido por el valle de Jordan, Cisjordania. Visitó a los granjeros y pastores palestinos, cuyos medios de vida han sido severamente desmantelados por los asentamientos respaldados por el estado. “Ese día, presenciar su resiliencia en medio de una opresión insoportable me dejó con un profundo sentido de responsabilidad”, dice.
Jacob estaba trabajando con los activistas del valle de Jordan, un grupo de solidaridad israelí que apoya a las comunidades palestinas. Las cámaras, en forma de CCTV, teléfonos inteligentes y cámaras de cuerpo o tablero, son fundamentales para su activismo. “La filmación actúa como un arma de disuasión y un medio de recolección de evidencia”, dice Jacob. Utilizando las imágenes de la organización de los últimos siete años, el artista inició un proyecto de instalación y publicación de colaboración, Marcos de anexión. De vuelta en Londres, proyectó los videos en Loop y manipuló el monitor a una impresora cercana. Se alentó a los visitantes a presionar la barra espaciadora como un acto de intervención. Esto desencadenaría una captura de pantalla para imprimir. Después del espectáculo, con el soporte de Zone6, ató las impresiones a un libro, en el orden exacto que se imprimieron ese día.
“Mi objetivo era ir más allá del consumo fugaz de imágenes violentas en las redes sociales, creando un espacio donde los espectadores pudieran comprometerse profundamente con el archivo y reflexionar sobre la lenta violencia de la ocupación”, dice. “Ver el proyecto tomar forma como una obra de arte colectiva reafirmó su propósito: fomentar el compromiso más profundo e intencional con imágenes violentas”. El objeto resultante es un producto táctil y estimulante de la resistencia colectiva, realizado en colaboración por Jacob, su audiencia, los activistas del valle de Jordan y las comunidades palestinas con las que trabajan.