El primer ministro de Pakistán acogió con satisfacción el miércoles un acuerdo, el primero de su tipo, con el Banco Mundial para un plan que centrará 20.000 millones de dólares en préstamos a la nación con problemas de liquidez durante la próxima década en cuestiones de desarrollo como el impacto del cambio climático, así como impulsar el crecimiento del sector privado.